
Después de 35 días, las protestas masivas continúan y se extienden a otras regiones de Irán como Tabriz. El sábado 22 de octubre lxs estudiantxs protestaron frente a la Universidad de Ciencias Médicas de Tabriz.
El punto importante de la protesta es que la gente sigue siendo autónoma, no ha sido controlada por ningún partido político ni por ningún agente extranjero.
Según un compañero kurdo de Irán, las gentes se han organizado, especialmente en la región kurda, en las calles y los barrios. Han creado sus propios grupos, comités con diferentes nombres, como Shura, consejo revolucionario, asamblea popular u otros nombres. Mientras tanto, el viernes un grupo anónimo de piratas informáticxs hackeó la base de datos de la emisora atómica y amenazó al gobierno con publicar todos los datos si no liberaba a lxs presxs de la prisión de Evin.
Mientras las protestas se hacen más fuertes, el Estado se esfuerza por utilizar cualquier cosa para reprimir y oprimir a lxs manifestantxs y sus familias, amenazándolxs, deteniéndolxs y matándolxs.
Según el Centro de Derechos Humanos de Irán, casi 12.500 individuxs han sido detenidxs en Irán y casi 250 han muerto desde que comenzaron las protestas callejeras. Según el centro, sólo en la provincia de Teherán han sido detenidxs 3.000 individuxs, de lxs que 835 permanecen en prisión, entre ellxs 200 estudiantxs universitarixs. Hasta 1.300 han sido enviadxs a la Penitenciaría Central del Gran Teherán desde la prisión de Evin, tras el incendio que se produjo en el interior del centro el fin de semana. La cifra de 12.450 detenciones ha sido dada por HRANA, un sitio web iraní de noticias sobre derechos humanos.
La represión ha alcanzado a profesorxs, escritorxs, artistas, cantantes, empleadxs, pequeñxs empresarixs y, por supuesto, a estudiantxs.
El Sindicato de Escritorxs de Irán emitió una declaración sobre la represión, diciendo: «La represión de lxs individuxs que protestan con las manos vacías ha sido un hecho cotidiano en los últimos 40 años. Pero lo ocurrido con lxs niñxs y lxs presxs la semana pasada es una de las páginas más negras en el historial del actual gobierno».
El sindicato añadió que «el ataque de las fuerzas de seguridad a las escuelas y cárceles, y la paliza y el asesinato de niñxs y presxs es una tragedia que va más allá del asesinato de manifestantxs en las calles. En esta etapa de represión, el gobierno, como siempre, niega la realidad, difunde rumores y distorsiona la opinión pública para frustrar los esfuerzos de las organizaciones y grupos populares por expresar la verdad».
En las escuelas, las fuerzas de seguridad exigen a lxs profesorxs que identifiquen a lxs alborotadorxs. Se arriesgan a ser detenidxs si se niegan. Al parecer, un profesor de Teherán murió a manos de las fuerzas de seguridad tras intentar proteger a sus alumnxs. Algunas universidades también están prohibiendo a lxs estudiantes asistir a las clases antes de las audiencias disciplinarias sobre su participación en las protestas.
El Consejo de Coordinación de las Organizaciones Sindicales de Profesores ha calificado la «entrada de las fuerzas de seguridad, militares y uniformadas» en las escuelas como una «violación de la privacidad de las escuelas y los espacios educativos» y una «represión sistemática».
Dijo: «No podemos concentrarnos en la pizarra en medio de la pólvora, el fuego y las balas. En estos días de historia del pueblo, habéis matado a varixs estudiantxs inocentes de este país con el corazón lleno de odio y las manos manchadas de sangre y os habéis jactado de ello. Vuestra risa de borracho puede ser escuchada por todxs».
Heẑĕn – هەژێن.
